Ya hace
unos meses que pasé a mi hija de la típica cuna de barrotes que tenía a su
actual cama para que tuviera más espacio mientras duerme y para adaptar su
comodidad de descanso al crecimiento que día tras día va desarrollando.
Para
todas las madres nuestras hijas son las reinas de la casa y lo más importante
es dedicarnos por completo a su bienestar, y uno de los sitios más acogedores
que debe tener el hogar para la pequeña es sin ningún duda su propia
habitación, así que decidí que deseaba proporcionarle una primera habitación de
niña lo más bonita posible y que se pareciera a la de una princesa, siempre con
la limitación del espacio de su dormitorio. Así que ahora os relataré todos los
pasos que realicé para decorar una cama de niña como el lugar idóneo para un
princesa.
Una de
los aspectos que tenía muy claro sobre la elección de su cama, era que deseaba
un mueble multifuncional. Ya que de por sí la cama suele ocupar más de un
tercio del espacio del cuarto y desaprovecha mucha superficie como por ejemplo
la altura. Yo de pequeña dormía con mi hermana en unas literas, que
evidentemente se utilizaba para compartir la habitación cuando las casas eran
pequeñas, pero si te pones a pensar realmente es un buena elección con
independencia del tamaño del hogar ya que maximiza la utilidad.
Así que
lo primero que tuve claro era que deseaba un estilo de camas altas juveniles donde además de dormir, mi niña también pudiera divertirse
o incluso jugar. Así que buscando un poco, me encontré con el siguiente diseño.
Como
podéis ver es una preciosidad de mueble, con la forma de un auténtico castillo
para mi hija, en la parte de arriba tiene un pequeño piso que puede servir como
planta superior para que pueda jugar con sus muñecas. Para subir tiene una
escaleras formados por cajones que se utilizan para guardar juguetes, libro,
ropa o zapatos, con lo que también se puede utilizar para guardar la ropa o
mantener ordenado el dormitorio y la cama de niña.
Y para
bajar de la parte de arriba hay dos opciones, utilizar la propia escalera, o
deslizarse por el divertido tobogán que posee en su izquierda. Con esta cama
alta obtenemos 3 funciones para mi hija: descansar, divertirse y guardar o
mantener ordenada la habitación.
Es
cierto que este tipo de mobiliario requiere de una habitación algo grande ya
que sus dimensiones son bastante voluminosas, fijaros que la cama donde duerme
la niña se debe poner en perpendicular al castillo con lo que limita su
utilización en cuartos poco amplios o en hogares con habitaciones bastante
ajustados.
Para
dar un aspecto visual todavía más extraordinario a la cama y que parezca la de
una auténtica princesa, me hacía falta encontrar una ropa de cama con un diseño
adecuado al ambiente, así que aproveché para adquirir unas fundas nórdicas o edredones para niñas que
pegara con la cama de princesa.
En un
principio pensaba que lo único que encontraría sería una colcha o una funda
nórdica con algún personaje de dibujos animados al estilo de La Cenicienta. Pero
me llevé una grata sorpresa cuando vi este peculiar diseño en vestimenta para
la cama de niña como princesa.
Es
justamente lo que andaba buscando, así cuando voy a acostar a mi hija y la veo
bien tapadita con el nórdico del vestido de princesa, es justamente su cara la
que acaba por completar el estampado de
la cubierta.
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